
Quién cuando estaba en la escuela, no iba a comprarle a la Sra. o a la Tía del Kiosco. Hoy recibí un llamado de una amiga de Santiago, avisándome que la Gordita Simpática del kiosco, nos dejo. Mi amiga me contaba que ella siempre se acordaba de mí.
¿Cuántas personas que uno ha conocido en la vida, te recuerdan con cariño y uno ni siquiera se da el tiempo de saber como están?.
Un abrazo tía MARICEL, YO TAMBIEN ME ACORDABA DE TI CON CARIÑO.

1 comentario:
A veces la rutina nos impide ver lo simple y observar que a nuestro alrededor existe gente que nos aprecia y siempre nos regala una sonrisa.
saludos
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